Javier Guerrero García, actual director de Operación y Evaluación del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), fue denunciado por presuntamente liderar un esquema de desvío millonario dentro de la institución. La denuncia fue presentada ante diversas instancias, entre ellas el Órgano Interno de Control del IMSS, la Fiscalía General de la República (FGR), la Secretaría de la Función Pública (SFP), la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF), el Servicio de Administración Tributaria (SAT) y la Auditoría Superior de la Federación (ASF), según informaron fuentes cercanas al caso.
Guerrero García, quien ha ocupado cargos de alto nivel en el IMSS desde junio de 2019, recibe un salario mensual bruto de 184 mil pesos, una cifra que solo es 7 mil 842 pesos inferior a la percibida por el presidente Andrés Manuel López Obrador. No obstante, a pesar de su elevado ingreso, enfrentó múltiples acusaciones de corrupción, incluso en su paso por otras instituciones como la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol), donde se le asoció con Emilio Zebadúa y el esquema de desvíos conocido como «La Estafa Maestra».
La denuncia señala que Guerrero García habría replicado en el IMSS mecanismos de desvío similares a los que utilizó en sus anteriores dependencias. Según el documento, aprovechó eventos institucionales, como las Asambleas Generales del IMSS, para inflar costos y desviar fondos mediante empresas fantasma. “Solo en las Asambleas 110 y 111 se habrían desviado más de 40 millones de pesos, sin contratos formales que respalden las operaciones”, menciona el escrito presentado ante las autoridades.
Entre las empresas señaladas en la denuncia se encuentran Comercializadora y Distribuidora Terrani S. de R.L. de C.V., Kitchen Space Solutions S. de R.L. de C.V., y Soluciones Profesionales Spira S.A. de C.V., todas supuestamente involucradas en la red de corrupción. Además, se acusa a otros funcionarios del IMSS, como Miguel Ángel Alvarado Luna, Mauricio Zebadúa Santos (familiar de Emilio Zebadúa), Carlos Lagunas Villagómez y Gerardo López Romo, de estar implicados en el presunto desvío de recursos públicos.
El escrito de la denuncia también señala que los fondos desviados presuntamente por García habrían sido lavados a través de inversiones inmobiliarias en Querétaro. Además, se advierte sobre la adquisición de bienes raíces por parte de colaboradores cercanos al funcionario, como Anabell Avendaño, Roberto Garza y Adrián Ríos, quienes habrían participado en estas operaciones financieras irregulares.
Un hecho que ha aumentado las sospechas sobre este personaje es su presunta vinculación con el asesinato de un dulcero en 2023 en la colonia Roma. En el lugar del crimen, se encontró una cartulina con amenazas dirigidas a altos funcionarios del IMSS, en las que se les acusaba de estar involucrados en actos de corrupción, lo que ha fortalecido las investigaciones en curso.
Frente a estos graves señalamientos, los denunciantes solicitaron que las autoridades realicen una investigación exhaustiva sobre los actos de corrupción en los estaría involucrado. Los delitos que se le imputan incluyen desvío de recursos, uso de empresas factureras, sobreprecios, licitaciones irregulares, colusión y tráfico de influencias. Exigen que, de encontrarse pruebas suficientes, se aplique todo el rigor de la ley.