Claudia Sheinbaum Pardo, candidata presidencial de la coalición Sigamos Haciendo Historia, reveló el supuesto modelo de negocio de la empresa de encuestas Massive Caller, que recientemente publicó resultados que la colocan ligeramente por detrás de su rival, Xóchitl Gálvez Ruiz, candidata de la coalición Fuerza y Corazón por México.

Sheinbaum Pardo desestimó los resultados de la encuesta de Massive Caller, que muestra a Gálvez Ruiz con una ventaja de dos décimas sobre ella. La exjefa de gobierno de la Ciudad de México afirmó que otras encuestas la posicionan con una ventaja promedio de 17 puntos sobre su oponente.

En relación con esto, la candidata presidencial mencionó que en 2018, Massive Caller se acercó a su partido, Morena, solicitando recursos para influir en una encuesta. Sheinbaum Pardo se negó a participar en dicho acuerdo, destacando que no manipulan encuestas y enfatizando que «las encuestas son las encuestas».

La candidata apodó a Massive Caller como «Massive Lier» (Mentira Masiva) y aseguró que la encuesta carece de credibilidad debido a la falta de metodología rigurosa. Sheinbaum Pardo defendió que las tendencias de otras encuestadoras reconocidas han sido consistentes a lo largo del tiempo.

Desde el inicio de las campañas presidenciales, varios voceros de Sheinbaum, como Gerardo Fernández Noroña y Tatiana Clouthier, han cuestionado la fiabilidad de los resultados de Massive Caller. La encuestadora había posicionado anteriormente a Sheinbaum con una ventaja de 10 puntos, pero luego recortó gradualmente esa distancia, hasta que la encuesta más reciente mostró una ligera ventaja para Gálvez Ruiz.

Esta situación generó un debate en redes sociales sobre la precisión de Massive Caller en procesos electorales pasados. En particular, se señaló que en 2018 la encuestadora no anticipó correctamente la victoria de Andrés Manuel López Obrador.

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