En un paso significativo hacia la modernización y mejora de la movilidad urbana, el Congreso de la Ciudad de México ha recibido la iniciativa presentada por la jefa de Gobierno, Clara Brugada, para implementar una licencia de conducir permanente. Esta propuesta, que se inserta como inciso B en el artículo 299 del Código Fiscal de la Ciudad de México, tiene como objetivo ofrecer una alternativa accesible y sostenible para los conductores de vehículos particulares.

La nueva licencia de conducir permanente tendrá un costo de mil 500 pesos, un precio competitivo que busca facilitar el acceso a este documento vital para miles de ciudadanos. Este cambio no solo simplificará los trámites para los conductores, sino que también promete fortalecer la seguridad vial en la metrópoli.

Como parte de esta iniciativa, se establecen artículos transitorios que indican que la Secretaría de Administración y Finanzas creará un fideicomiso público sin estructura. Este fideicomiso será esencial para recibir y gestionar los recursos generados por las licencias, con el fin de destinar dichos fondos a la infraestructura pública de transporte y movilidad. De esta manera, se busca que la implementación de esta licencia contribuya al desarrollo y mantenimiento de un sistema de transporte más eficiente y seguro para todos los capitalinos.

Esta propuesta representa un avance importante en la política de movilidad de la ciudad, promoviendo no solo el acceso a servicios más ágiles, sino también el bienestar y la seguridad de los ciudadanos. La expectativa es que esta medida impacte positivamente en la calidad de vida de los habitantes, facilitando su movilidad y mejorando la infraestructura urbana.

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